Alfonso Simón Pelegrí, mexicano nacido en Málaga (1926), ha tenido trato constante con la poesía de Rafael Alberti, Antonio Machado, Miguel Hernández, y transita del endecasílabo más puro al verso de corte repentino y de sonoridad sugerente, nueva.
Alfonso Simón, es un devoto del verso castellano o, si se quiere, del verso andaluz y sureño. Por ello y por muchas razones más, lo seducen los asuntos coloquiales, como el del meditado y conmovedor poema que le dedica a Salmerón, el tonto del pueblo.
Alfonso es conocido en México y España por un selecto grupo de lectores que profesan la poesía rigurosa y la narrativa de fuerte acento estilístico y se resisten a las modas si éstas olvidan el oído certero, la imagen nítida y memorable.
El puño de sonetos sobre el toro Lázaro está destinado a las antologías de esta y la otra orillas del océano y el idioma.