Silvia Molina nació en la ciudad de México en 1946. Estudió antropólogía en el INAH y letras hispánicas en la UNAM. Premio Villaurrutia en 1977 por su libro La mañana debe seguir gris (Ed. Joaquín Mortiz), becaria del Centro Mexicano de Escritores en 1979-1980, publicó en esta misma editorial Leyendo en la tortuga (1981).
A mediados del siglo XIX, los mayas se rebelaron contro sus dominadores. Apoderándose de una vasta extensión de Yucatán, casi echan a su [sic.] opresores al mar. Oficialmente las campañas militares duraron siete años, pero nunca hubo una victoria total; los rebeldes conservaron las selvas orientales de Yucatán hasta principios del siglo XX. Este episodio de la historia de México se conoce como la Guerra de Castas. Silvia Molina vislumbró en este material histórico el germen de una novela. Ascensión Tun es la historia de la orfandad, no sólo de algunos personajes, sino de todo un territorio: el Sureste de México. En una atmósfera de discordia, pasiones y lealtad, los personajes reviven acontecimientos de la Guerra de Castas y de la visita de la emperatriz Carlota a aquel lugar.
Bramón, Francisco Marmolejo, Pedro de Estrada de Medinilla, María Ortiz de Torres, Juan Alavés Pinelo, Alonso de Terán de la Torre, Antonio Bocanegra, Matías de Sandoval y Zapata, Luis de Salazar y Torres, Agustín de Guevara, Juan de Ribera, Diego de Cruz, Sor Juana Inés de la Lima, Ambrosio de la Perea y Quintanilla, Miguel Ramírez de Vargas, Alonso Ramírez Santibáñez, Juan Antonio Acevedo, Franciso de Santillana, Gabriel de Delgado y Buenrostro, Antonio Santoyo García, Felipe de Castro, José de Muñoz de Castro, Pedro
