Enciclopedia de la Literatura en México

Raúl Hernández Viveros

Nació en Ciudad Mendoza, Veracruz, el 9 de diciembre de 1944. Narrador. Estudió en la Facultad de Letras de la uv. Ha sido encargado del Departamento Editorial de la uv; director de La Palabra y El Hombre; fundador de Academus y Cosmos. Colaborador de Academus, Cosmos, Excélsior, La Palabra y El Hombre, Revista del Sur, Revista de la Universidad de México y Sábado. Becario de las universidades de Varsovia, Polonia, y Sofía, Bulgaria, en 1970 y 1982, respectivamente, como escritor residente.

Estudió en la Facultad de Letras de la Universidad Veracruzana (uv), donde tuvo a su cargo el Servicio Bibliográfico Universitario y el Departamento Editorial. Radicó en Polonia y en Bulgaria becado como escritor residente por las Universidades de Varsovia (1970–1971) y Sofía (1982), y en Checoslovaquia, invitado por la Unión de Escritores de ese país; también estuvo en Estocolmo, París, Italia, Austria y Suecia. Desde muy joven ha fundado y dirigido varias revistas en su estado natal: México Nuevo; Academus (1964–1968) y Cosmos (1973–1975) y La Palabra y el Hombre. Coordinó el suplemento cultural “Enfoques”, del Gráfico de Xalapa y los semanarios Punto y Aparte y La Crónica. Sus cuentos, reseñas y artículos de crítica literaria han aparecido en varias revistas y suplementos de Xalapa, Revista del Sur, Texto Crítico y su columna periodística “Ventana”, en el diario Política; en las revistas Universidad de México y Plural, los suplementos “Sábado”, del diario Unomásuno y “El Heraldo Cultural”, de El Heraldo de México y en Excélsior. Ha participado en varios encuentros literarios sobre cuento y novela policial en México y el extranjero. Es autor de libros de cuentos: Hasta que el cuerpo aguante y Adiós al rey del Merecumbé, y dos novelas Con la vida no se juega y El baile de las flores, así como la antología Poesía nueva de Veracruz.

Raúl Hernández Viveros, narrador y ensayista, manifiesta preocupación por el hombre actual y la problemática social en la que se ve inmerso. Sus relatos podrían inscribirse en la corriente del realismo crítico, pues hay en ellos una denuncia implícita de los mecanismos económicos, políticos y culturales que regulan el comportamiento individual. Sus personajes son burócratas, prostitutas, luchadores y estudiantes de clase media que se ven envueltos en la mediocridad, la soledad y la decadencia; algunas veces el autor mezcla sarcasmo y humor negro, otras, introduce una situación o un elemento absurdo e insólito que convierte su historia en relato fantástico, como en Los tlaconetes, en donde hay un permanente cuestionamiento de los condicionamientos históricos y una continua interrelación entre la fantasía y la realidad. Las historias de Secretos de una musa son más bien de corte psicológico donde sus protagonistas se ven envueltos en la tragedia. En la novela, Entre la pena y la nada, alterna elementos de intriga y espionaje con lo policial; problemas actuales como el terrorismo, el tráfico de drogas y la manipulación de bienes por parte del clero, todo ello con algunos elementos simbólicos y fantásticos.