Una obra que ya no necesita presentación, que ha sido recibida con los brazos abiertos en el mundo de habla hispana rompiendo los records de ventas nacionales de los últimos años. Diez mil ejemplares en un período que no llega a los ciento veinte días.
Protegida por la libertad de expresión que respiramos, la obra de Martré viene, como el Quijote con los antiguos libros de caballería, a acerrar el género conocido como "Literatura Tlatelolca", cubriendo todos los vacíos, cerrando las brechas y proporcionando un nuevo enfoque de los acontecimientos.
Editorial V Siglos, S. A., vocero de todas las ideas, pone en manos de sus lectores el libro conflictivo y polémico de la última década,
La matanza de Tlaltelolco tuvo muchos testigos, pero quizá ninguno tan privilegiado como Gonzalo Martré, quien en 1968 era director de la Preparatoria Uno de la UNAM. El 2 de octubre, Martré estuvo presente en la Plaza de las Tres Culturas al momento de la masacre. Los símbolos transparentes narra ese momento y ofrece una nueva perspectiva del Movimiento, las motivaciones de los estudiantes, la indiferencia de las autoridades, los que murieron bajo la represión del Ejército, los torturados, los desaparecidos, aquellos que se unieron a la guerrilla o los que han vivido lisiados para siempre sin olvidar sus ideales. La trama avanza en torno a la brigada Lucio Blanco, un grupo informativo y propagandístico integrado por Humberto, Víctor, Saúl, Andrés, Rosa y El Pifas, seis jóvenes inscritos al Movimiento Estudiantil inspirados por alcanzar un futuro distinto. Después de que Los símbolos transparentes estuvo censurada por décadas, al atreverse a llamar por su nombre a los personajes más importantes del régimen y por denunciar la crudeza de sus métodos, y a pesar de que Octavio Paz afirmó en su poema Postdata que los símbolos de nuestra historia se volvieron transparentes después de Tlatelolco, Alfaguara retoma su publicación.
