Ignacio Osorio Romero nació en Temascalcingo, Estado de México en mayo de 1941 y murió en Ciudad de México en junio de 1991. Obtuvo su licenciatura, maestría y doctorado en Letras Clásicas por la Universidad Nacional Autónoma de México. Fue profesor de la Facultad de Filosofía y Letras de la misma institución, investigador del Instituto de Investigaciones Filológicas y director del Instituto de Investigaciones Bibliográficas y la Biblioteca Nacional. Fundó, junto con Roberto Heredia y Germán Viveros el proyecto "Inventario y estudio de los materiales bibliográficos y documentales mexicanos o referentes a México escritos en latín". El trabajo de investigación que Osorio Romero se centró en el rescate bibliográfico de documentos del México colonial y nutrió en gran medida el estudio de la filosofía y literatura novohispanas.
Estudió la licenciatura, la maestría y el Doctorado en Letras Clásicas, en la Facultad de Filosofía y Letras (ffyl) de la Universidad Nacional Autónoma de México (unam). En esta misma Facultad fue profesor de materias de su especialidad, coordinador del Colegio de Letras Clásicas y jefe del Centro de Apoyo a la Docencia. Fue investigador en el Instituto de Investigaciones Bibliográficas y en el Centro de Estudios Clásicos del Instituto de Investigaciones Filológicas (iifl). Estuvo al frente de la Dirección General de Publicaciones y de la dirección del Instituto de Investigaciones Bibliográficas de la unam. Colaboró en el Proyecto Historia de las Bibliotecas de México coordinado por la Secretaría de Educación Pública (sep); fungió como asesor académico del Proyecto de rescate de textos literarios novohispanos en el Ramo de Inquisición del Archivo General de la Nación (agn). Fue secretario de redacción del Boletín de la Biblioteca Nacional y miembro del consejo editorial de la revista Nova Tellvs, del Centro de Estudios Clásicos.
Ignacio Osorio Romero fue un destacado investigador de las letras neolatinas y jesuitas en Nueva España. Además del rescate de textos de autores desconocidos, como el poeta José de Villerías, sus investigaciones se proponían esclarecer la problemática social de los criollos novohispanos, inherente a la conformación de una cultura bilingüe (castellana y latina). Las instituciones, los profesores, los textos y métodos utilizados para la enseñanza del latín, así como los autores clásicos con los que se encontraban familiarizados los estudiantes son objeto de su atención en Tópicos sobre Cicerón en México, Colegios y profesores jesuitas que enseñaron latín en Nueva España (1572-1767) y Floresta de gramática, poética y retórica en Nueva España (1521-1767); mientras que La enseñanza del latín a los indios muestra un aspecto de la polémica del siglo xvi acerca de la conveniencia de la enseñanza a los indígenas de las lenguas y el pensamiento occidentales y que, en última instancia, era un cuestionamiento sobre la licitud de la conquista. Conquistar el eco reúne una serie de artículos ya publicados que trazan las coordenadas de sus investigaciones posteriores. En La luz imaginaria, su obra póstuma y producto de la investigación directa en archivos de Bolonia, Italia, recoge el valiosísimo epistolario entre el filósofo Atanasio Kircher y algunos jesuitas novohispanos. A su muerte dejó inconclusa la investigación sobre las tesis presentadas en la Universidad de México durante el siglo xviii.
Instituciones, distinciones o publicaciones
Facultad de Filosofía y Letras FFyL (UNAM)
Instituto de Investigaciones Bibliográficas IIB (UNAM)
Instituto de Investigaciones Filológicas IIFL (UNAM)
Biblioteca Nacional
Secretaría de Educación Pública (SEP)
Instituto de Investigaciones Bibliográficas IIB (UNAM)
Instituto de Investigaciones Filológicas IIFL (UNAM)
Dirección General de Publicaciones y Fomento Editorial (UNAM)
Sistema Nacional de Investigadores (SNI)
Colegio de Letras Clásicas (Facultad de Filosofía y Letras-UNAM)
