Hace más de dos mil años el filósofo griego Leucipo se preguntaba hasta dónde sería posible cortar un pan en rebanadas, sugiriendo que la materia estaba formada por cierta partícula fundamental e indivisible. En la actualidad, gracias a inventos tan sorprendentes como el acelerador de partículas, sabemos, entre otras cosas, que el átomo puede fragmentarse en partes inconcebiblemente pequeñas. No obstante, los científicos afirman que lo que hoy se conoce de la composición íntima del átomo todavía es muy poco, tanto como lo que sabemos sobre el universo y su origen.
En Cazadores en el horizonte, Carlos Chimal se da a la difícil tarea de explicarnos los últimos hallazgos y alcances de la Física con respecto al átomo, las altas energías y el mundo subatómico. La realidad que nos revela este texto se parece cada vez más a un relato de ciencia ficción, donde lo comprobable y evidente cede lugar a ideas tan extrañas como la antimateria y la relatividad del espacio-tiempo; donde el mundo tal como lo conocemos es sólo una estación en la ruta de la luz a través del cosmos.
