Enciclopedia de la Literatura en México

Península, Península

El hombre está hecho más para la guerra que para la paz y más para el odio que para el amor. Eso se puede concluir sabiendo lo que piensan los indígenas de la Península de Yucatán cuando en 1847 estalla la cruenta Guerra de Castas: "Quemaron nuestros pueblos matando a grandes y a chicos dentro de sus casas. Ahorcaron a nuestros caciques sin más razón que una leve sospecha. Y ahora nos acusan de atacar a los blancos con la tea y el machete y nos dicen salvajes, olvidando que durante siglos nos han matado de hambre y esclavitud. Todo nuestro ganado se lo llevaron los blancos, nos quitaron las milpas, quemaron a nuestros dioses, nos recogieron las armas y nos diezmaron a sangre y fuego. Y ahora vienen a recordarnos que hay un Dios verdadero y que somos sus hermanos".

¿Qué es la novela sino un juego del que se sirven memoria e imaginación para evocar otras voces y otros tiempos? Hernán Lara Zavala nos llevan del siglo XXI al XIX a través de personajes tan disímiles como un médico irlandés, una institutriz inglesa, caudillos mayas, familias de alcurnia, un obispo, un peculiar novelista y un inolvidable perro negro. 
* Esta contraportada corresponde a la edición de 2008. La Enciclopedia de la literatura en México no se hace responsable de los contenidos y puntos de vista vertidos en ella.


1847, Península de Yucatán, República Mexicana. Ira y resentimiento campean en un mundo de blancos rodeados de criados y sirvientas mayas, de mujeres que no tienen nada más para dar que a sí mismas, de hombres con un par de manos y un machete que lo mismo desbrozan henequén que se rebelan contra sus amos.

Un mundo suave en apariencia, de una injusta pero permanente convivencia cotidiana que de repente estalla de maneras incomprensibles para quienes se han servido con holgura de tierras, hombres y mujeres. Una hoguera feroz, un infierno donde a pesar de todo hay trazas de humanidad y evidente, inquebrantable amor sustentado en la esperanza.

La crítica ha dicho#

«Hace mucho que no leía una novela mexicana que me interesara tanto como Península, Península

Emmanuel Carballo

«He terminado de leer Península, Península con enorme agrado; la fluidez, el vigor, el dibujo de situaciones y personajes, los diálogos, todo ha sido un deleite.»

Noé Jitrik

«Con Península, Península aprendí mucho sobre la historia de Yucatán y pude apreciar tanto la investigación histórica como el talento del novelista.»

Seymour Menton

«No sabría decirte el disfrute y gozo total que me ha traído tu novela histórica. Casi me asustó, Hernán. Terminando de leer la primera página estuve a punto de dejarla pensando: no hay quien pueda sostener este nivel.»

Tita Valencia

* Esta contraportada corresponde a la edición de 2018. La Enciclopedia de la literatura en México no se hace responsable de los contenidos y puntos de vista vertidos en ella.