Enciclopedia de la Literatura en México

Ícaros desorientados

Ícaros desorientados no es un libro pesimista. De eso lo salva la modulación de la expresión del autor, que es capaz de darle la vuelta, con la ironía o la cotidianeidad fuera de plazo de una expresión inesperada, a guisa de cachorro juguetón o lluvia imprevista sobre la cabeza de un pensamiento machaconamente adoptado, a cualquier giro por el que corríamos peligro de deslizarnos por la cuesta de la desolación. Mesura sería, quizá, la palabra que más le conviene a este modo de escribir. 

Ícaros desorientados es, ante todo, una vuelta a casa. A la casa de las palabras, que es como se ha de llamar a la poesía. A saber, el único hogar en el que las máscaras se resquebrajan y recobramos la oportunidad de reconocernos. En palabras del poeta: “Han tocado a la puerta y era yo: he venido a buscarme”.

* Esta contraportada corresponde a la edición de 2015. La Enciclopedia de la literatura en México no se hace responsable de los contenidos y puntos de vista vertidos en ella.