Enciclopedia de la Literatura en México

Memoria y recuerdo : microhistoria de Ayotitlán

La población se descubre súbitamente al pie del cerro del Calvario; un cerro pequeño y gordo, testigo mudo e indolente, pero fiel custodio natural. Desde el camino se divisan primero, por su altura, las torres flacas de ladrillo aparente de la iglesia nueva donde se alberga la figura de Bartolomé, el apóstol protector de la comunidad, y entre cientos de copas verdes se asoman como sombreros dispersos los tejados rojo oscuro de las casas. Cada vez son menos los tejados de ese tipo; año con año las casas de material y bóveda crecen en número, tamaño y comodidades. La entrada principal está adornada por árboles pequeños; el pavimento termina y el empedrado anuncia que ya se entró al pueblo. Aunque las piedras son muy viejas, el empedrado de las calles es reciente y hasta parece nuevo y descansado.

* Esta contraportada corresponde a la edición de 2003. La Enciclopedia de la literatura en México no se hace responsable de los contenidos y puntos de vista vertidos en ella.