Enciclopedia de la Literatura en México

Animal doméstico

Los panales han ido desapareciendo, pero todavía algo en nuestro cuerpo nos los recuerda. De no dejar vivir a las abejas, en un futuro aquellas complejas estructuras de las que escurre miel estarán extintas. La anticipación a ese peligro está presente en el primer poemario de Andrea Alzati (Guanajuato, México, 1989): Animal doméstico, el cual fue publicado en una cuidadosa edición a finales de 2017 por el sello independiente mexicano Juan Malasuerte.

La primera sección del libro, llamada «miel», abre con el poema «panal», en él los zumbidos se petrifican, igual que el recuerdo de un obsequio: la abuela envuelve un trozo de aquella geometría para regarla a quien nos habla; y una vez que el panal es separado de la sustancia para la que fue hecho, muere.

Al verse amenazado un panal vivo también es amenaza, razón suficiente, se sugiere en el poema, en sí mismo para ser destruido por el miedo; la vibración de las abejas en conjunto sólo podría ser comparada con la intensidad del fuego con que son combatidas. Se nos dibuja entonces cómo seca ya la cera se convierte en polvo; y en el poema, además, se enumera todo lo que hay en su estructura. Eso lleva al Yo a pensar en producir para alimentar y en alimentar para subsistir, entonces asegura «mi cuerpo no es un panal»:

pero esta mañana mis tetas se veían tan blandas debajo del agua
caliente en la regadera
que

podría haber jurado estar más viva que nunca

* Esta contraportada corresponde a la edición de 2017. La Enciclopedia de la literatura en México no se hace responsable de los contenidos y puntos de vista vertidos en ella.