Enciclopedia de la Literatura en México

César Dávila Andrade : el poema, pira del sacrificio

Un ensayo literario es un lenguaje mediador, un texto al servicio de otro texto. He procurado ante todo comprender una obra poética reticente y reservada, que no se ofrece jamás abiertamente, ni con claridad ni a la primera mirada. Toda obra literaria inventa su propio método de lectura y de análisis. Como escribe Guillermo Sucre, el sentido surge del contacto de unas palabras con otras, de su frotación y de la irradiación que de ellas emana, y de esa frotación, añado, brotan chispas, saltan las chispas de esa cosa indefinible que es la poesía. Si expresar un significado es una función hermenéutica, ¿cómo expresar aquello que, con frecuencia, carece de él? ¿Hermenéutica de la poesía? Es posible. En un ejemplo famoso, Heidegger lo ha hecho, al interpretar la obra de Hölderlin. El poeta romántico es un príncipe de las tinieblas. Los surrealistas y los expresionistas son románticos. A esta estirpe perteneció César Dávila Andrade. Su poetizar está regido por lo imprevisible, un surrealismo personal, no militante. Su vocación fue de riesgo, de aventura, y en esa búsqueda sin tregua entregó su vida. La idea del sacrificio es una constante de su poesía, quizá la fundamental, a la cual concurren todas las demás y de la que también se desprenden como haces irradiantes. Y, como si su muerte fuera el último verso de un poema, él mismo se sacrificó en una tarde de Caracas. Ningún poeta ecuatoriano transitó por la poesía con tal vocación de riesgo. Sabía que hacer poesía era un juego mortal y a eso jugó hasta inmolarse.

Vladimiro Rivas

* Esta contraportada corresponde a la edición de 2008. La Enciclopedia de la literatura en México no se hace responsable de los contenidos y puntos de vista vertidos en ella.