Dentro podría haber cualquier cosa, desde mariposas disecadas, un huevo de dinosaurio, el mapa de una isla misteriosa o una pluma de pájaro dodo. Sin embargo, contenía cuadernos. verdes y delgados, de esos que se podían comprar antes en cualquier papelería y que hoy ya no existen. También encontré dos piedras. Una blanca y otra negra. Él y yo. Nosotros. Una tarjeta firmada lo coronaba todo: «Viernes: Haz con ellos lo que quieras».
Comparto con ustedes uno de ellos. Se llama Corazonadas. Está escrito por mi tío Paco, el hombre que de muchas maneras me salvó la vida y logró convertir lo ordinario en extraordinario.
* Esta contraportada corresponde a la edición de 2016. La Enciclopedia de la literatura en México no se hace responsable de los contenidos y puntos de vista vertidos en ella.