Enciclopedia de la Literatura en México

El zarzo de los pemoles

Este libro, pan de esperanza pasado por el horno, está hecho del maíz amasado con el diálogo de aquel que se sabe a la deriva, al arbitrio impredecible del fonema; he abierto el postigo de la noche, a fin de mirar cómo entra el alba en la tierra y descubrir el génesis continuo que es la vida.

Nos habla Carlos de un pan simple, dulce, frágil; donde el hombre es el pan mismo, conformado por naturaleza-tierra­universo-hombre, círculo que sin una de sus partes sería incompleto reducido a nada; Carlos Acosta elige entregarnos en estas hojas el corazón desmoronado, disperso en cada frase que le dicta su alma, y la certidumbre de saberse a merced de las horas en que, absorto, mira lo que es y lo que somos.

Si al tener ante tus ojos estos versos, te sientes quebradizo, vulnerable, y con cierto cosquilleo de dulzura estremeciéndote, no habrá más remedio que declares: soy un Pemol, no lo niego, y mi cuerpo fue formado de maíz y de oraciones, mi origen es común al tuyo y a la primera mordida me desmorono, cada parte de mí nombra un adiós y una esperanza; a donde quiera que voy me sigue, el terrible signo de andar/ a la deriva/ con la gracia imperfecta de estar vivo/ y la sutil consigna de la muerte, con el rumor de otoño golpeando mi silencio y la amargura de mi sino que sólo es conjurada por abrazos.

Ausencio Martínez Lucio

* Esta contraportada corresponde a la edición de 2012. La Enciclopedia de la literatura en México no se hace responsable de los contenidos y puntos de vista vertidos en ella.