Aunque se recibió de abogado (1924), dedicó la mayor parte de su vida a la cinematografía, como argumentista, adaptador y director. Fue secretario general de la Unión Nacional de Autores (1941), de la Sección de Argumentistas y Adaptadores Cinematográficos, del Sindicato de Trabajadores de la Producción Cinematográfica de la República Mexicana (stpc de la rm) y del Sindicato de Directores. En 1945 fue elegido secretario del exterior del stpc de la rm; fue jefe de la Oficina de Espectáculos. En 1946 participó en la fundación de la Academia Mexicana de Ciencias y Artes Cinematográficas y colaboró en la revista Celuloide, dirigida por J. C. Manjarrez.
Adolfo Fernández Bustamante, además de su labor como cineasta, es autor de dos revistas musicales (Cuadros y pintores y El calendario del año), de dramas como El cobarde y Judith; de una comedia policiaca, El crimen de Insurgentes, escrita en colaboración con Antonio Helú, y de la letra de la canción Un viejo amor. Según informa Heriberto García Rivas, tradujo “autores norteamericanos, ingleses y franceses”.
