Hijo del escritor Arturo Sotomayor. Participó en un Taller de Títeres, en la Casa de Lago, de la Universidad Nacional Autónoma de México, en 1975; tres años más tarde, ingresó al Centro de Arte Dramático para estudiar teatro con Eduardo Barrientos y Héctor Azar. Egresó como licenciado en Actuación, de la Escuela de Arte Teatral (eat), del Instituto Nacional de Bellas Artes (inba), en 1986. En 1979 formó un taller de teatro en la Casa de la Cultura del Periodista, donde montó cinco obras de autores mexicanos, incluyendo una de él mismo. Trabajó en televisión bajo la dirección de Raúl Araiza, en 1981, y con el grupo “El fin del principio” en los montajes A puerta cerrada, de Jean Paul Sartre y Canto a mí mismo; en Noche de bandidos, dirigida por Jesús González Dávila, Sucedió entre changos. Entre árboles... Mexipale, el país de los duendes, obra escrita y dirigida por él. Después de terminar sus estudios se fue a vivir a Oaxaca; donde participó en la Compañía Estatal de Teatro y con los grupos “Juglarón A.C.” y “Zipi-Zape”; actuó en el papel principal de Edipo Rey, de Sófocles, bajo la dirección de Jesús Cabrera, y durante un año trabajó con comunidades rurales en la costa de Oaxaca, presentando leyendas del lugar con marionetas y títeres. En 1987, en la ciudad de México, formó el grupo “Ollin Teatro” con actores de la eat y de la unam; montó las obras ¿En qué quedamos pelona?, Duende y Quinto Sol con marionetas, títeres y actores. En 1991 formó el grupo “Adrián y sus secuaces” con quienes presentó el espectáculo Ciudad sin sueño, de José Ramón Enríquez. Ganó el Premio Plural, de la revista con el mismo nombre, por la obra La vela de la luna loca, en 1990; el Premio Teatro Amateur, otorgado por la Asociación de Periodistas Teatrales, y un Premio Especial a la obra Frida, en 1993, así como el Premio por la Revelación en Dramaturgia por La vela de la luna loca, por la Unión de Críticos y Cronistas de Teatro, en 1994. Esta obra fue traducida al francés en el libro Teatro Mexicano y representó a México en Europalia 93.
Adrián Sotomayor, actor, director y dramaturgo, se interesó en la representación del mundo indígena y las tradiciones prehispánicas que aún subsisten en el pueblo mexicano. Inició su carrera teatral en el terreno de la actuación, peldaño que le permitió entender la fuerza del escenario y la magia que se puede crear a través de éste. Además de su participación como actor, Sotomayor creó talleres y montó obras que le permitieron experimentar temas (leyendas) y formas teatrales (actores y marionetas en el escenario). Su primera obra, Entre árboles..., es infantil: Cesi y Lico conocen a un duende que los guía por Mexipale, el país de los duendes, donde aprenden que deben luchar por sus ideales y no hacer la guerra por venganza u odio. En Quinto Sol, con marionetas javanesas creadas por él, explica la creación del Quinto Sol y del hombre, así como el descubrimiento del maíz en la época prehispánica. La vela de la luna loca aborda la fiesta en Juchitán, Oaxaca, de los homosexuales; las tradiciones, las costumbres, la malicia del juchitecto es enfrentada a la ignorancia de un joven capitalino quien llega al pueblo el día de la fiesta (o vela). En Frida aborda la figura de la pintora mexicana para presentar aspectos de su vida profesional y personal. Finalmente, en su obra Fuera del alma su interés en el realismo mágico, la fatalidad y la hechicería se hacen presentes en esta historia donde aborda las costumbres ancestrales que aún subsisten en las comunidades indígenas.
